jueves, 5 de abril de 2012

ETIQUETAS

Valorar, apreciar, juzgar, estimar...todos ello verbos muy distintos a...crear. Como anunciaba en los incios del año, en casa hemos hecho nuestro primer vino y el proceso te lleva fase a fase por los caminos no siempre sencillos de la creación. Ahora mismo estaba dándole vueltas al asunto de la etiqueta. Tal como están las cosas, la etiqueta es toda una declaración de "personalidad", no solo para el vino que contiene, sino de los que lo hacen, sus aspiraciones, status de la bodega y hasta hay quien asegura en este post que al final compras según lo que te comunica ese pedacito de papel.
Mientras sigo trasteando con la composición gráfica, dejo este vino que da nombre a mi actividad de la tarde y además es ejemplo de hasta dónde llega hoy la necesidad de buscarse la vida para destacar en las estanterías...Salud

  


 










PD: doy fe de que el vino cumplía con todos esos adjetivos y que para nada era "una sopa" :)